El presidente de los Estados Unidos debe estar preparado para viajar a cualquier parte del mundo en cualquier momento. Afortunadamente, los presidentes modernos tienen acceso a una variedad de opciones de transporte, incluido el Air Force One.

Técnicamente, se utiliza “Air Force One” para designar cualquier avión de la Fuerza Aérea que transporte al Presidente, pero ahora es una práctica estándar utilizar el término para referirse a aviones específicos que están equipados para transportar al Comandante en Jefe.

En la actualidad, este nombre se refiere a uno de los dos aviones Boeing 747-200B altamente personalizados, que llevan los códigos de cola 28000 y 29000. La designación de la Fuerza Aérea para el avión es VC-25A.

El Air Force One es uno de los símbolos más reconocibles de la presidencia, con innumerables referencias no solo en la cultura estadounidense, sino en todo el mundo. Blasonado con las palabras "Estados Unidos de América", la bandera estadounidense y el sello del presidente de los Estados Unidos, es una presencia innegable dondequiera que ondee.

Capaz de reabastecerse en vuelo, el Air Force One tiene un alcance ilimitado y puede transportar al presidente a donde necesite viajar. La electrónica de a bordo está reforzada para protegerlo contra pulsos electromagnéticos, y el Air Force One está equipado con avanzados equipos de comunicaciones seguras, lo que le permite funcionar como centro de mando móvil en caso de un ataque a Estados Unidos.

En el interior, el presidente y sus compañeros de viaje disfrutan de 370 metros cuadrados de espacio en tres niveles, incluida una amplia suite para el presidente que cuenta con una gran oficina, un baño y una sala de conferencias. El Air Force One incluye una suite médica que puede funcionar como quirófano y hay un médico a bordo de forma permanente. Las dos cocinas de preparación de alimentos del avión pueden alimentar a 100 personas a la vez.

El Air Force One también cuenta con alojamiento para quienes acompañan al presidente, incluyendo asesores principales, oficiales del Servicio Secreto, periodistas itinerantes y otros invitados. Varios aviones de carga suelen volar delante del Air Force One para proporcionar al presidente los vehículos y servicios necesarios en lugares remotos.

El mantenimiento y la operación del Air Force One están a cargo del Presidential Airlift Group, parte de la Oficina Militar de la Casa Blanca. El Airlift Group fue fundado en 1944 como la Oficina del Piloto Presidencial bajo la dirección del presidente Franklin D. Roosevelt. Durante los siguientes 15 años, varias aeronaves propulsadas por hélice prestaron servicio al presidente hasta que el presidente Dwight D. Eisenhower voló a Europa a bordo del VC-137A, un Boeing 707 Stratoliner, en agosto de 1959.

En 1962, el presidente John F. Kennedy se convirtió en el primer presidente en volar en un avión construido específicamente para uso presidencial: un Boeing 707 modificado. A lo largo de los años, se han utilizado varios otros aviones a reacción, y el primero de los actuales se entregó en 1990 durante la administración del presidente George H. W. Bush.